El joven isleño Abraham Santos Almagro, de 21 años, se convierte en nuevo jugador de nuestro equipo para lo que resta de temporada.
Pero, a pesar de ser nuestro fichaje más importante, no viene de ningún equipo de primera, ni ha sido internacional, ni nada por estilo. Abraham jugó en las categorías inferiores del Club hasta que cumplió los doce años. A partir de ese momento, no solo abandonó la práctica del fútbol, sino que también su vida comenzó a dar un giro de 180º que le llevó a caer, como a tantos otros jóvenes, en esa maldición llamada droga.
Pero Abraham no se ha rendido y desde hace algo más de un año se encuentra en rehabilitación en el Centro ARATI, y aunque siempre hay que estar alerta, ese demonio traicionero siempre intenta volver, hoy es un hombre nuevo.
Hace unos meses nos pidió poder entrenar con el equipo, quería volver a disfrutar del deporte, de su fútbol. Quería volver a ponerse unos guantes y situarse bajo los palos de una portería. Y como no podía ser de otra manera, le dijimos que adelante, sin problema. Desde entonces Abraham ha sido ejemplo de constancia, puntualidad y compromiso, no con el Club, con quien no tenía ninguno, sino consigo mismo.
Y sus ganas, ilusión y trabajo le han llevado a volver a firmar una ficha para la práctica del fútbol federado, nada más y nada menos que en 1ª Andaluza. Es muy probable que este mismo domingo Abraham entre en la convocatoria y, después de tantos años, vuelva a vestirse de portero.
Gracias Abraham por la lección de esfuerzo, superación y fe, de vida en definitiva, nos has dado. Gracias por darnos motivos para convencernos de que todo el esfuerzo que dedicamos a sacar esto para delante tiene su recompensa. Esta temporada, gracias a ti, ya somos campeones.
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